
Saqué esta foto hace más de un año en San Francisco, la tengo guardada en el móvil desde entonces. Andando por el centro de la ciudad, vi el cartel en cuestión en una tienda cualquiera, y lo que me llamó la atención es el signo de exclamación.
Me hizo gracia porque creo que refleja una tendencia general. Con esto de la hipercomunicación a distancia (IM, emails rápidos, estatus de Twitter etc., comentarios a estatus…) ha nacido lo que se podría llamar “efecto sello de goma”, que consiste en añadir signos de exclamación y emoticones a mensajes por escrito totalmente aburridos o planos en lo que a sentimientos se refiere, con la esperanza de darles un poco de alegría.
Está muy bien que vendas sellos de goma, pero de ahí a celebrar emocionado que vendas sellos de goma, pues hay mucho. Imagínate cómo lo diría el responsable de la tienda: ¡Vendemos sellos de goma personalizados! ¡Yupi!
En realidad, lo que hizo gracia del cartel es que este efecto de sello de goma es algo que cada vez más hacemos todos, en nuestro día a día. Bueno, al menos yo y la gente con la que me comunico por email y IM, añadimos más signos como :), ! … etc. etc., imagino que con el objetivo de dejar claro que estamos de buen rollete:). Incluso en títulos de posts en blogs corporativos, donde se anuncian temas tan apasionantes como la venta de sellos de goma, se incluye el signo de exclamación y ya está, todos felices.
Alguien te hace un ping por IM pero tú estás liado. ¿Tú qué respondes?:
– No puedo hablar, te llamo luego
– No puedo hablar, te llamo luego!
– No puedo hablar, te llamo luego:)
– No puedo hablar, te llamo luego…
O vas a lanzar una nueva funcionalidad en tu web, y al título del post le añades un par de “!!”. Parece que el entusiasmo que le pones al título refuerza tu capacidad de liderazgo. “Vendemos sellos de goma personalizados!”, venga, todos a comprar como locos!!!!
Y tú, ¿has puesto ya un signo de exclamación en tu vida?
Pues eso…:)!